No he notado cambios en su comportamiento, ni está más mimosa, ni ñoña... sí que he visto que los dos últimos días hace pipí más veces y poquita cantidad ¿Será un aviso para los otros perros? (¡Chicos, hay un nuevo Pivón en la ciudad!) ¡Pues va lista!. Al primero que se acerque a mi niña le enseño los dientes!!!! jejejeje. Ya os digo que no he notado ningún cambio importante en la peque, ayer vi unas manchitas en el suelo y esta mañana en la cama, así que la he examinado y, efectivamente, es el celo, y mirándola bien sí me he dado cuenta de que tiene la vulva un poco hinchada, pero no mucho. En su mami era mucho más evidente.
He encontrado un Spray que disimula el olor del celo para evitar problemas cuando salgamos de paseo, pero aún así, vamos a cancelar nuestras visitas al parque hasta que se le pase... ya os contaré si veo que el spray es efectivo...
Ahora, ella aún no es receptiva a la monta. Eso sucede entre el sexto y el decimo primer día después de que haya comenzado el sangrado. Después, durante aproximadamente una semana, estará dispuesta a aceptar al macho. Pero No, No, No!!! por eso tengo que extremar las precauciones durante ese periodo.
Si estáis pensando en tener una camada, recordad que el primer celo no es el momento adecuado. El desarrollo aún no está completo si la hembra es jovencita y puede tener problemas durante la gestación. Lo ideal es esperar al menos, hasta el tercero.
Bueno, ¡seguiremos informando!
Muy instructivo, amiga. Seguiré tus apreciaciones con mi cachorrita, que cumplirá los ocho meses en abril. ¡Uf, primavera! ¡Peligro, peligro!
ResponderEliminarGracias por tu comentario, ya nos contarás tu experiencia... ¡Y suerte!
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